Escaleras
Algo que sigue una constante en el listado automático de obras de arte que me gustan es precisamente lo poco populares de las mismas, cuando traté de investigar el autor de una de ellas en google, me remitió a un blog que se llama soliloquio.
Leí lo que estaba escrito en esa bitácora sobre la obra en mención y lo primero que pensé es que: primero, a quien se le ocurre ponerle atención a unas escaleras comunes y corrientes en una biblioteca, este tipo es de los que se interesa por las cosas mas insulsas. aburridas y ridículas. Lo segundo fué que, parecía que yo ya hubiera leído eso en algún lado, de hecho perfectamente, tan aburrido autor podría ser yo.
Contemplar la imágen de las escaleras, me permitió despertar a medias del trance en el que me emcontraba pero que no había tenido conciencia segundos antes.
Desviando un poco la atención, pude darme cuenta que a medida que mis ojos pasaban por cada letra, una fuerza extraña dotada de personalidad propia me obligaba a esciribir en esa bitácora sobre obras casi desapercibidas en la historia del arte, un tema que por difenrentes razones se ha convertido en algo recurrente en mi vida cotidiana y yo no me había percatado de ello.
Yo creo que es un sitio donde uno puede evidencia lo que lleva por dentro , donde los seres imaginarios que habitan dentro de todos los mortales, nos poseen y por un breve instante nos subyugan a que escribamos y leamos lo que ellos quieren, por un instante se cambian los papeles y ellos nos dominana y donde existe una historia diferente para cada lector, un escrito deacuerdo a la versión de su propio solioquio.
O como mas se explica que yo, antes de escribir sobre las escaleras de la biblioteca laurenciana salga de cuarto en la consulta de google.
Leí lo que estaba escrito en esa bitácora sobre la obra en mención y lo primero que pensé es que: primero, a quien se le ocurre ponerle atención a unas escaleras comunes y corrientes en una biblioteca, este tipo es de los que se interesa por las cosas mas insulsas. aburridas y ridículas. Lo segundo fué que, parecía que yo ya hubiera leído eso en algún lado, de hecho perfectamente, tan aburrido autor podría ser yo.
Contemplar la imágen de las escaleras, me permitió despertar a medias del trance en el que me emcontraba pero que no había tenido conciencia segundos antes.
Desviando un poco la atención, pude darme cuenta que a medida que mis ojos pasaban por cada letra, una fuerza extraña dotada de personalidad propia me obligaba a esciribir en esa bitácora sobre obras casi desapercibidas en la historia del arte, un tema que por difenrentes razones se ha convertido en algo recurrente en mi vida cotidiana y yo no me había percatado de ello.
Yo creo que es un sitio donde uno puede evidencia lo que lleva por dentro , donde los seres imaginarios que habitan dentro de todos los mortales, nos poseen y por un breve instante nos subyugan a que escribamos y leamos lo que ellos quieren, por un instante se cambian los papeles y ellos nos dominana y donde existe una historia diferente para cada lector, un escrito deacuerdo a la versión de su propio solioquio.
O como mas se explica que yo, antes de escribir sobre las escaleras de la biblioteca laurenciana salga de cuarto en la consulta de google.
This entry was posted on viernes, abril 29, 2005 at 10:14 p.m..
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30/4/05 11:27 ATiene razon me gustó mucho....
1/5/05 13:42 A
M.C.Escher en letras
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