post-orinada
Hay un par de ideas que han estado vagabundeando por estos dias en mi cabeza, me pidieron que les cambiara el ambiente humedo, gris y oscuro de mi cerebro por el pulcrisimo blanco de mi blog, razones fitosanitarias alegaban ellas, y dada mi innata incapacidad hacia la argumentacion, no tuve opcion difernete que dejarlas residir donde ellas me lo habian pedido.
La primera de ellas es respecto a la lavada de las manos cuando uno va orinar. No es quiero desconocer las bondades que Sr Pasteur nos ensenyo, llegando al extremo, de no saludar, como es debido a sus invitados por temor a contagiarse de germenes.
Mi inquietud radica justamente en esa preocupacion, si uno lleva una higiene con la ascepcia debida, la costumbre de lavarse las manos despues de haber orinado es bastante contraria al argumento de los germenes?
Porque? para mi, dicha accion deberia realizarse, justo antes de uno tener contacto con sus intimidades, si uno no tiene sarna, sifilis, chancro trepador, blando, duro o alguna otra variedad de esas enfermedades, y (en mi caso) se banya ascepticamente todos los dias, veo que es mas probable contagiar a "nuestro mejor amigo" de alguna vaina rara si uno no se ha banyado las manos ANTES de saludarlo.
Contrario a este analisis, se nos exhorta a banyarnos las manos como si fueramos los portadores de la mas potente de las gonorreas justo Despues de echarnos nuestra " espumosa".
Nota al margen: Mi papa es un instruido hombre de academia, pero ese termino de la "Espumosa" se lo escuche a el.
Yo la verdad no encuentro razon de peso para tan irracional comportamiento, la unica explicacion logica que se me viene a la cabeza es que podriamos tener contacto con nuestra tibia y amarilla miccion (inomrtalizada musiclamente por Pablo Carbonell).
Lo incongruente del asunto es que nuestra mal tratada aguita amarilla ha sido el elixir de la vida en innumerables situaciones cuando, la vida nos trata como planta (de los pies?): proveernos de nuestro propio alimento. y funciona a la perfeccion por varios dias dicen los entendidos.
Ademas yo reconozco que soy tan descordinado que no puedo caminar y mascar chicle al mismo tiempo porque me caigo y que no se como hace mi sombra para seguir mi arritmia natural. Pero puedo dar fe de que aprendi a orinar sin tener contacto con ese liquido indeseable?, algunas veces y nos sucede a todos los hombres es un poco complicado deshacerse de la ultima y rebelde gota del liquido por mas que uno sacudidas que se intenten, (decian mis amgios en la adolescencia que mas de 3 veces no es sacudida) e inexorablemente va a parar a las paredes del calsoncillo.
A mi no me da pena mencionar aca que esta discreta conversacion la habia tenido antes dentro de mi soliloquio, y por ende mi comportamiento era coherente frente a mis cabalas.
Para cerrar este post solo me resta decirles que me entraron ganas de ir a orinar y que me meo en la persona que se invneto la ridicula norma de banyarse las manso post orinada
La primera de ellas es respecto a la lavada de las manos cuando uno va orinar. No es quiero desconocer las bondades que Sr Pasteur nos ensenyo, llegando al extremo, de no saludar, como es debido a sus invitados por temor a contagiarse de germenes.
Mi inquietud radica justamente en esa preocupacion, si uno lleva una higiene con la ascepcia debida, la costumbre de lavarse las manos despues de haber orinado es bastante contraria al argumento de los germenes?
Porque? para mi, dicha accion deberia realizarse, justo antes de uno tener contacto con sus intimidades, si uno no tiene sarna, sifilis, chancro trepador, blando, duro o alguna otra variedad de esas enfermedades, y (en mi caso) se banya ascepticamente todos los dias, veo que es mas probable contagiar a "nuestro mejor amigo" de alguna vaina rara si uno no se ha banyado las manos ANTES de saludarlo.
Contrario a este analisis, se nos exhorta a banyarnos las manos como si fueramos los portadores de la mas potente de las gonorreas justo Despues de echarnos nuestra " espumosa".
Nota al margen: Mi papa es un instruido hombre de academia, pero ese termino de la "Espumosa" se lo escuche a el.
Yo la verdad no encuentro razon de peso para tan irracional comportamiento, la unica explicacion logica que se me viene a la cabeza es que podriamos tener contacto con nuestra tibia y amarilla miccion (inomrtalizada musiclamente por Pablo Carbonell).
Lo incongruente del asunto es que nuestra mal tratada aguita amarilla ha sido el elixir de la vida en innumerables situaciones cuando, la vida nos trata como planta (de los pies?): proveernos de nuestro propio alimento. y funciona a la perfeccion por varios dias dicen los entendidos.
Ademas yo reconozco que soy tan descordinado que no puedo caminar y mascar chicle al mismo tiempo porque me caigo y que no se como hace mi sombra para seguir mi arritmia natural. Pero puedo dar fe de que aprendi a orinar sin tener contacto con ese liquido indeseable?, algunas veces y nos sucede a todos los hombres es un poco complicado deshacerse de la ultima y rebelde gota del liquido por mas que uno sacudidas que se intenten, (decian mis amgios en la adolescencia que mas de 3 veces no es sacudida) e inexorablemente va a parar a las paredes del calsoncillo.
A mi no me da pena mencionar aca que esta discreta conversacion la habia tenido antes dentro de mi soliloquio, y por ende mi comportamiento era coherente frente a mis cabalas.
Para cerrar este post solo me resta decirles que me entraron ganas de ir a orinar y que me meo en la persona que se invneto la ridicula norma de banyarse las manso post orinada
This entry was posted on viernes, octubre 08, 2004 at 2:23 a.m..
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