Parquicidio
La razón es que me parece que es sencillamente una infamia que luego de haber prometido que no se fumigarían los parques naturales, se esté procediendo sin piedad a eliminar de la manera mas obtusa cuanta vida vegetal hay en un lugar que ha sido declarado santuario y con una riqueza genética aún sin valorar.
Los problemas con el glifosato, aunque poco comentados son ampliamente concidos, este es una gente defoliante, es decir que su poder químico arrasa con cualquier árbol o arbusto que esté a su paso en cuestión de minutos, pero no solo eso, este noble fungicida es bien conocido por sus agentes cancerígenos y las altas dosis de sustancias contaminantes que segrega en cuanta forma animal, vegetal o mineral esté a su alcance, contaminando por igual fuentes de agua, y en general cualquier forma de vida.
Uno de sus mas connotados parientes es el trístemente célebre agente naranja, empleado en Vietnam con el mismo objetivo de defoliar y descubrir las posiciones enemigas, luego de varias décadas de haber sido usado este gas, aún siguen apareciendo personas con mutaciones genéticas y deformaciones causadas por este hermano del glifosato (de hecho la compañía que desarrolló ambas bendiciones es la misma; Monsanto).
Lo mas preocupante es la actitud del Gobierno frente a la responsabilidad que debe asumir en el vertimiento de este veneno tanto en las economías locales como en los impactos a largo plazo que este parquicidio causará. Además de enpobrecerlas (aún más) las deja sin recrusos para salir adelante, como siempre los pobres son los más golpeados y a los que menos opciones les quedan.
En fin mi espiritu hippie-marihuanero-ambientalista está diciendo que ya es hora de callarme, dejare así para no seguir derramandome en prosa.