Legalv

Prefiero el cielo por el clima y el infierno por la compañía. W. Shakespeare

Bogotá sin aire





Lo primero que recuerdo de bajar del avión cuando aterricé en Ciudad de México a los 6 o 7 años es que los ojos me empezaron a picar, rascar y posteriormente a salir lágrimas y no precisamente de felicidad.

Los índices de enfermedades respiratoiras, en esa época (y me atrevería afirmar que actualmente también) es uno de los mas grandes a nivel mundial, pero lo mas grave es que el Gobierno tenía pleno conocimiento que los riesgos para la salud iban mas allá de las de por sí graves complicaciones asmáticas. A unos diplomáticos polacos les llegó una carta donde el gobierno recomendaba insistentemente que la gestación y nacimiento de su hijo se realizara en otro sitio distinto a México DF, preferiblemente en su propio país.

La razón es sencilla, eran los tiempos en los que la gasolina contenía plomo. Lo que el Gobienro quería prevenir (únicamente a la élite, porque en A.L. son los únicos que no son ciudadanos de segunda) era una malformación genética del feto producto del contacto con plomo, un conocido y trsitemente célebre agente mutagénico.

El plomo lo desterraron de las refinerías porque si bien mejoraba el rendimiento, tenía ese "pequeñito" problema para la salud humana, el retiro se hizo con bombas y platillos; a tal punto que aún es posible ver (acá en Colombia) como se alardea sobre Gasolina con 0 plomo, lo que no se cuenta es la razón última de la mejora, lo del asunto ese de las mutaciones. Para evitar cualquier suspicacia se argumenta que se hizo para reivindicar el comportamiento ambiental intachable de las empresas y por su puesto la incontrovertible vocación y gestión ambiental del gobierno.

No quiero rayar en lo anecdótico ni mucho menos en lo apocalíptico pero Bogotá está claramente pasando por una situación bastante similar, donde los peligros se trivializan a punta de información incompleta.

Creo que todos hemos visto los ringletes cubiertos por polución en las calles, esos artilugios no sirven para absolutamente nada excepto por brindar una falsa percepción de "medición" los ringletes no van a informar cual es la concentración de SOx, COx, COV y demás variables que afectan la calidad del aire, pero definitivamente sí van a contribuir a que la gente PERCIBA un cierto "environmental concern" por parte de la Adminsitración.

Puede sonar bastante "conspiranoico" pero si se tiene en cuenta que las particulas contaminantes presentes en el aire bogotano, ascienten a 1000* ppm cuando los niveles permitidos para la salud humana, son entre 150 -250ppm según la norma y el incremento alarmante de las enfermedades respiratorias, la idea de los ringletes y mucho menos campañas light, alucivas a la importancia de la protección ambiental en el día sin carro no suena para nada descabellada, es mercadeo sencillamente.

Resulta transparente que, eso de construir políticas energéticas austeras y estrictas es demasiado honeroso, adminsitrar socialmente los recursos comunes es algo que no genera dividendos. Lo clave, lo verdaderamente importante es gestionar un plan de marketing estratégico para "vender el producto de otra manera", la salud de las personas puede esperar, igual, para que queremos vivir mas si ya somos muchos.

----------------------------
*Les debo la fuente del dato esto lo escuché por radio, visité la página del DAMA pero no encontré el dato.
« Home | Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »
| Next »

3/2/06 19:01 A Blogger Rana Berden le dió por decir ...

Irónico que sólo se piense en el aire cuando no está limpio. Es como el asunto con el agua, que la apreciás cuando tenés sed. Irónico porque ambos esenciales en muchos sentidos.

Ahora la entrada de la biogasolina supone un avance en la preocupación medioambiental. De todas formas, creo como Ud. que es más mercadeo que otra cosa.

Interesante tu espacio. Por acá regresaré.    



5/2/06 13:28 A Anonymous Anónimo le dió por decir ...

Yo me preguntaba quién estaba detrás de los ringletes.

A mí me parecía que como era algo simbólico, debido al nivel de 'precisión' que tenían, se trataba de alguna campaña de un movimiento ciudadano, ecológico o incluso una instalación de algún artista (?). Pero nunca me imaginé que fuera una idea de la Administración.    



5/2/06 20:58 A Blogger legalv le dió por decir ...

Rana: De acuerdo contigo, eso suele ocurrir especialmente cuando son recursos de uso común la "apreciación" del bien cambian en la medida en que se deteriora, es una lógica bastante perversa, gracias por tu comment por acá bienvenida.

Cavorito: Pa´que vea lo bien que andamos en gestión ambiental.    



» Publicar un comentario